Ya no merece la pena que demos más vueltas alrededor de la situación actual, que nos sumerjamos en el pesimismo y sigamos fomentando la pérdida del color de la vida. Hemos tenido que aprender a bailar escuchando una escala de grises, quedar con nuestros amigos sin poder estar con ellos, disfrutar de la cultura sin poder sentirla y buscar alternativas para pasar el tiempo libre. Y en este aprendizaje, la tecnología se ha convertido en un fiel compañero de viaje que en Topes de Gama y Panasonic disfrutamos como un hobbie. Sin temor a equivocarnos, podemos decir que la tecnología ha cambiado por completo nuestra nueva rutina.

 

¿Qué habría sido de nosotros sin poder hablar con nuestros familiares y amigos durante los meses más duros de confinamiento? ¿Cómo habríamos sobrevivido sin engancharnos a las mejores series del momento o hacer ejercicio escuchando nuestras playlists favoritas? Hace mucho tiempo que la tecnología nos acompaña, pero nunca había sido tan importante para ayudarnos a escapar de la realidad, justo cuando más lo necesitábamos.

 

 

En los últimos meses, hemos pasado muchísimas tardes sentados delante del televisor, dispuestos a disfrutar de una sesión de cine, pero también nos hemos puesto manos a la obra con la operación bikini. Hemos tenido tiempo suficiente para llegar en plena forma al verano gracias a la motivación de nuestras playlists y el sonido potente de unos auriculares True Wireless. Y como nunca está de más dedicarnos algo de tiempo, hemos podido probar nuevos peinados, cuidar de los nuestros o arreglarnos la barba con nuestros productos de confianza de Panasonic. La verdad es que, aunque no lo parezca, hemos tenido días para todo. Incluso hay algunos que descubrieron su faceta más cocinitas, preparando un pan crujiente y sabroso gracias a panificadoras como la Croustina de Panasonic.

La pandemia, a pesar de habernos distanciado físicamente, nos ha unido más que nunca porque hemos podido hacer planes en familia (sin salir de casa) y nos ha permitido reencontrarnos virtualmente con amigos que hacía siglos que no veíamos. En este sentido, la tecnología ha sido indispensable tanto en nuestra vida personal como en la profesional. Las empresas han tenido que pasarse al mundo digital de forma rápida, y los trabajadores se han tenido que adaptar a una nueva manera de hacer las cosas.

En nuestro caso, la pandemia nos ha enseñado a usar la tecnología de una forma más creativa que antes. Por ejemplo, en nuestro programa de vídeo podcast semanal, hemos conseguido que Carlos Santa Engracia aparezca en el plató de Madrid, mientras se comunica desde la oficina de Barcelona. Y eso por no mencionar el momento de grabación de cualquier vídeo. Para limitar los contactos entre personas, hemos usado más que nunca el control remoto de nuestra Panasonic Lumix GH5. Así, hemos podido configurar el plano, la iluminación y el enfoque sin necesitar ayuda de otra persona.

Porque esta es la razón de ser de la tecnología. Nos acerca en la distancia, nos ayuda a trabajar sin tener que ir a la oficina o a levantar nuestro pequeño comercio de una situación desfavorable. No hace la vida más fácil, llevadera, interesante e incluso divertida. Nosotros, por nuestra parte, siempre estaremos dispuestos a explicarla como si te la estuviera explicando un amigo, huyendo de los tecnicismos y acercando la tecnología a todas las personas posibles.