Si eres un apasionado de la fotografía sabrás que las vacaciones son una ocasión rica en momentos fotográficos que no hay que desaprovechar. Pero ¿seguro que le estás sacando todo el partido fotográfico a tus vacaciones? Te mostramos aquí cómo disfrutar y obtener tus mejores fotografías de verano.
Si estabas en plenos preparativos para tu inminente viaje vacacional date una pausa, lee mi siguiente propuesta y dime qué opinas 😉
Una cosa más: este modesto post persigue el objetivo de provocar en ti unas inmensas ganas de poner en práctica los consejos aquí expuestos y mejorar así tus resultados en tus fotografías de verano. Antes de proseguir la lectura, promete que pondrás alguno, aunque sea uno, en práctica.
¡Vamos a ello!
1) Quien mucho abarca…
Parece que cuantas más cámaras tengamos, cuanto más grande, compleja y avanzada sea la cámara, cuantos más objetivos y accesorios tengamos, mejor. Digo “parece” porque no siempre es mejor. Lo peor que puedes hacer en un viaje vacacional es pretender llevar 3 kilos de material fotográfico encima. Un viaje fotográfico especializado es otra cosa, pero uno vacacional, con la familia, amigos o pareja, y en el que el fin fotográfico va combinado con otros fines lúdicos y de desconexión y descanso, en este tipo de viajes no puedes pretender llevar todo tu patrimonio de aparatos y gadgets fotográficos. Cuando tu objetivo es obtener buenas fotografías de verano mientras disfrutas disparar se hace muy difícil y la creatividad se te evapora cuando llevas 3 horas callejeando con una mochila de 3 ó 5 kilos a la espalda.
Procura llevar una cámara que ofrezca un buen equilibrio entre tamaño y peso por un lado, y calidad por otro lado. A veces es mejor sacrificar “ligeramente” las opciones (configuración avanzadas; multitud de objetivos; etc.) a cambio de poder llevar un equipo pequeño, ágil, efectivo y práctico, una cámara con la que sí puedas hacer fotos. ¿Qué eres un purista de la óptica? Lleva 1 objetivo especializado, 2 a lo sumo. No más.
Recuerda el dicho, quien mucho abarca poco aprieta. En fotografía, como no aprietes, no hay foto.
2) Ármate de inspiración: antes, durante y después del viaje
Antes de partir de viaje date una vuelta por Flickr, Instagram o Pinterest e inspírate en los trabajos de otros fotógrafos que hayan visitado los lugares a los que vas. Inspirarse no es copiar. Es aprender. Es poder aportar algo nuevo basado en algo ya existente. Observar los trabajos de otros fotógrafos te permitirá dar con esa foto que tú mismo por dentro siempre habías querido hacer pero que no acababas de descubrir. Este ejercicio es una manera estupenda para inspirarte y obtener el mejor resultado en tus fotografías de verano.
Durante el viaje también es un buen momento si quieres meterte en estas redes sociales fotográficas para echar un vistazo a temáticas parecidas a la que quieres fotografiar. Si llevas un smartphone o una Tablet y dispones de conexión de datos o Wi-Fi, eso ayudará.
Una vez finalizado tu viaje, pasadas las fotos al ordenador, terminadas de procesar y listas para compartir y consumir, además de compartirlas y difundirlas (recuerda que una foto no compartida es una foto muerta, la fotografía fue concebida para compartir el resultado), dedica unos minutos a observar los trazos más distintivos de tus fotografías comparadas con los trabajos de otros usuarios que visitaron y retrataron esos mismos lugares.
3) Saca tu «Yo» más creativo
Durante el viaje deja que tu “Yo” más creativo se haga cargo de la cámara. ¿Sabes cuantas personas han inmortalizado la Torre Eiffel? ¿Crees que ya no se puede innovar? Nada más lejos de la verdad. Cada disparo y cada composición obedecen a una combinación de circunstancias únicas: muy pocas personas habrán fotografiado la Torre Eiffel desde exactamente el mismo punto y perspectiva que lo vas a hacer tú, a la misma hora del día y con las mismas condiciones de luz, con el mismo filtro, mismos ajustes, mismo encuadre, etc.
Tienes un margen infinito para crear fotos únicas de sitios turísticos típicos y obtener las mejores fotografías de verano. Aprovecha todo lo que conozcas de consejos y trucos de fotografía y ponlo en práctica para mostrar una cara nueva de un monumento viejo, tradicional o típico. Échate al suelo si hace falta y fotografía desde una perspectiva poco habitual, añade un muñequito al encuadre para obtener un divertido juego de (des)proporciones, busca personajes particulares entre los viandantes.
No dejes que nada te limite.
4) Aprovecha los momentos intempestivos
En vacaciones todo está abarrotado. A menos que busques retratar a los demás turistas, es normal que tus fotos de paisajes urbanos y monumentos salgan llenas de estos personajes que se afanan en desvirtuar nuestra composición 🙂
Si la localización de tu hotel y tus demás condiciones personales te lo permiten, baja a fotografiar estos lugares en momentos en los que haya muy poca afluencia: por la mañana temprano o muy tarde en el día es un buen momento (por no hablar de los beneficios estéticos de la luz propia del amanecer y del atardecer). Estos momentos te ayudarán a obtener grandes y únicas fotografías de verano.
La noche también tiene su “magia” a la hora de fotografiar lugares turísticos con otra perspectiva poco común.
5) Disfruta, sobre todo.
A menos que seas un profesional y que vivas de la fotografía (en cuyo caso dudo que la combines con tus vacaciones), no necesitas estresarte para conseguir las mejores fotografías de verano. Las vacaciones son un momento de desconexión y relax. Que todo lo que hagas o dejes de hacer sea para cumplir este objetivo por favor. ¿Incluso la fotografía? Desde luego.
La sensación de disfrute y de placer que te produce el conseguir esa fotografía que tanto deseabas no tiene que convertirse en un motivo de estrés, agobio o discusión. Sonará contradictorio pero no lo es: a veces para conseguir una gran foto conviene apagar la cámara. Esperar el momento adecuado. Disfrutar de los tuyos y dejar que ellos disfruten contigo.
No olvides que la fotografía es sólo para retratar y dejar para la posterioridad un momento de felicidad.
Primero ten ese momento de felicidad.
¡Felices vacaciones y buenas fotografías de verano!
