Llevamos algunas semanas en las que te hemos explicado diferentes consejos y trucos para mejorar tus fotografías de paisajes. Hemos hecho un repaso por los temas más importantes: Las texturas y la iluminación, los elementos en movimiento y el color de la luz natural y hoy poniendo fin a los tutoriales fotográficos de paisajes, hacemos un repaso de los problemas más frecuentes ante los que os podéis encontrar además de un breve repaso de lo más importante a tener en cuenta en esta disciplina fotográfica.
Los problemas frecuentes que nos podemos encontrar en las fotografías de Naturaleza y Paisaje son los siguientes:
Elementos no deseados
En los paisajes es frecuente encontrarse con elementos que no queremos que aparezcan en la imagen. Para tratar de obviarlos podemos cambiar el punto de vista y variar la distancia focal o jugar con un elemento más cercano para intentar que los oculte.
Calima. Humedad en el aire
En paisajes muy abiertos con elementos muy lejanos es frecuente tener una pérdida de contraste producida por la humedad en el aire. Se puede aumentar el contraste para intentar minimizarlo.
Diferencia de luminosidad excesiva
En algunas escenas podemos encontrarnos con elementos muy oscuros y elementos muy luminosos. Podemos usar la opción de exposición inteligente de las cámaras Lumix G y reducir el ajuste de contraste de la cámara para evitar partes quemadas. Si la diferencia es demasiado grande deberemos optar por exponer para las sombras o para las luces; resultará de ayuda usar la medición puntual. Además, el sistema Lumix G incorpora la herramienta D Range que nos permitirá adecuar las altas luces y las sombras para mejorar la exposición.
El movimiento. Elementos dinámicos.
Cuando queremos conseguir mostrar el movimiento de un elemento dinámico en la imagen necesitamos usar tiempos de exposición muy largos. En algunas ocasiones la intensidad de luz de la escena es excesiva, por lo que deberíamos trabajar con la sensibilidad ISO más baja (100) y el diafragma más cerrado, 22.
El color
El control del color de la luz mediante el balance de blancos es complejo en algunos momentos del día. Podemos disparar en raw, con el balance de blancos automático. Durante el revelado de raw podemos reajustar la temperatura de color para conseguir el color deseado.
Busca el punto de vista sin mirar por la cámara
Analizamos la escena; decidimos los elementos que queremos que aparezcan en la imagen y buscamos el punto de vista prescindiendo de la cámara. De esta forma, no estamos condicionados por el formato ni la distancia focal que tenemos montada en la cámara. Una vez lo hemos encontrado, montamos el trípode y la cámara, ajustamos la distancia focal y el encuadre y realizamos la imagen.
Elige el formato que más se adecue a la escena
Podemos probar los distintos formatos que nos ofrece la cámara: 1:1, 4:3, 3:2 y 16:9. Elegimos el que se adecue más a la escena que queremos fotografiar según tenga una distribución más o menos horizontal.
Control de la velocidad de exposición
En escenas muy luminosas donde queremos usar un tiempo de exposición más largo y no tenemos la opción de cerrar más el diafragma, podemos usar filtros de densidad neutra (filtro ND). Estos filtros reducen la intensidad de la luz que entra en la cámara permitiendo poder exponer la imagen durante más tiempo.
Polarización de la luz del cielo
Cuando nos encontramos con diferencias muy grandes entre la luminosidad del cielo y el resto de la escena podemos minimizarlo utilizando un filtro polarizador.
Movimiento
Para conseguir el movimiento fluido de un elemento utiliza distintos tiempos de exposición para comparar los resultados. Consigue la mejor representación del movimiento.
Busca la mejor luz
Aprovecha las primeras y las últimas horas de luz para hacer imágenes. Durante esta franja de tiempo la diferencia de luminosidad entre zonas iluminadas y zonas de sombra es menor y las imágenes no tienen tantos problemas de contraste. Además la luz es más cálida y tiende a saturar los colores.
EN POCOS PASOS
Elegir el punto de vista.
En las fotografías de Naturaleza y Paisaje debemos buscar un punto de vista que nos dé una distribución ordenada de los elementos que aparecen en la imagen. Elegiremos la distancia focal una vez elegido el punto de vista.
- Cuidar las obstrucciones visuales.
Los elementos más cercanos nos ocultan los elementos más lejanos, produciendo una obstrucción visual. Podemos aprovecharlo para ocultar elementos no deseados o rellenar partes poco interesantes.
- Explicar la textura de los elementos.
Podemos potenciar la textura de la superficie de los elementos con una dirección de la luz rasante. Podemos aprovechar las horas de luz más cercanas al amanecer y al atardecer para superficies situadas en el suelo.
- Relaciones entre partes iluminadas y sombras.
Es importante tener en cuenta que los elementos que están iluminados tienen un peso visual mayor en la imagen. Y también la dirección de la luz para destacar los elementos principales de la imagen.
- Aprovechar los reflejos del agua.
Podemos plantearnos jugar con los elementos reales y los reflejados para crear una composición simétrica o mostrar elementos reflejados que no aparecerían en la imagen. Lo que vemos en el reflejo depende del punto de vista.
- Mostrar la trayectoria de los elementos dinámicos.
En las escenas donde hay elementos en movimiento podemos elegir entre congelar el movimiento o mostrar su trayectoria. Solo necesitamos elegir un tiempo de exposición acorde con lo que queremos conseguir.
- Controlar el color de las imágenes.
Podemos controlar el color de las imágenes eligiendo la temperatura de color y ajustando la saturación. Podemos hacerlo en el momento de realizar la toma o al revelar el raw.
- El tono del blanco y negro.
Cuando nos proponemos realizar una imagen en blanco y negro debemos cuidar las diferencias de luminosidad entre los elementos. Podemos aumentar el contraste para enfatizar la diferencia entre las partes más y menos luminosas de la imagen.
