Fíjate en la imagen que tienes a continuación. Sí, sí…no te equivocas… es un muñeco de nieve en pleno desierto…mmmmm…ya sabemos lo que estas pensando…” ¡Anda, pero si esto es plastilina!”. Escucha lo que te vamos a contar y comprobarás tú mismo que se trata de nieve:

Campo de Japón, 13 de enero de 2011

Un equipo de ciencias monta un muñeco de nieve en un campo japonés recubierto de nieve. Una vez terminado se recubre con paneles de aislamiento al vacío de Panasonic y viaja  8.000 kilómetros sin ningún tipo de compresores de refrigeración. ¿Dónde viaja? A un lugar donde la mayoría de niños no ha visto nunca la nieve: Bahrein.

 

Bahrein,  15 de enero de 2011.

Hay una caja  en medio del desierto y entre la expectación de los niños que la rodean preguntándose que será, aparece un muñeco de nieve que no se derrite y que lleva la sonrisa perfecta en sus labios.

 

Locura…Primero los niños se quedan con cara de sorprendidos, los rostros se convierten en alegría y luego el desenfreno…los niños empiezan a jugar.


 

El equipo de ciencias lo ha logrado y después del viaje comenta: “Cuando salimos de Japón, incluso cuando dejamos el campo de nieve hacía mucho calor y en el aeropuerto mucho más. Y al llegar a Bahrein ya no te puedes ni imaginar. Lo que estoy tratando de decir es que estábamos muy nerviosos por todo el asunto. Pero, en realidad, nuestro socio impresionante, el guardián de la energía térmica Panasonic lo logró. ¡Es una tecnología dulce! «

 

Amna y su carta

 

¿De quién fue la idea? Amna, una chica de Bahrein deseaba que su hermano pudiera ver la nieve por primera vez. Por eso el equipo de ciencias se puso a trabajar. Saleh, un niño tímido y silencioso, estaba feliz y divirtiéndose con la nieve y daba la gracias a su hermana: “Fue increíble. No me esperaba que el muñeco de nieve fuera tan hermoso. Quiero dar las gracias a Amna por hacer que esto me suceda a mí», dijo Saleh.

Amna comentó sobre la eficacia del aislamiento al vacío. «Fue increíble cómo algo tan simple podría mantener el muñeco de nieve de la fundición. Me alegro que Saleh y todos los niños lo disfrutaran. A mi me gustó mucho también», dice Amna.

Como os podéis imaginar, el Sr. muñeco de nieve no duró mucho tiempo fuera de la caja… además los niños hicieron bolas de nieve con el muñeco, se las lanzaron y se las metieron en las camisetas de la gente. Os dejamos el vídeo completo de toda la hazaña del muñeco de nieve:

 

 

¿Cuál será el próximo reto? ¿Dónde harías llegar el muñeco de nieve?