Volvemos con un nuevo capítulo de nuestras Bloggers por el Mundo. Aleyda y Ariadna, de EligeNuestraAventura, ya están de vuelta con otro destino asiático. Es el turno de Malasia y la foto del mes, tomada como siempre con una de nuestras cámaras Lumix.
¡Aquí la tenéis!
País: Malaysia
Población: Georgetown, Penang
Día: 16/12/2012
Hora: 14:44
Localización: Mansión Azul
Modelo LUMIX DMC-GF2
Objetivo: 14-42
Apertura: 4.0
Velocidad: 1/200
ISO: 100
F= 14.00mm
Balance de Blancos: Auto
Para descubrir Georgetown, tienes que caminar entre sus callejuelas, dejarte guiar por el olor de sus puestos de comida callejeros y empaparte de su mezcla de culturas y de su arquitectura. En cada esquina descubres una shophouse restaurada que ahora alberga un hotel, un café o una galería de arte, y entre medio de todo esto aparecen las mansiones de las familias chinas más ricas de la época, como es el caso de la “mansión azul” que os mostramos en la foto.
La mansión es de propiedad privada, sólo puedes acceder a su interior en un tour guiado 2 veces al día, y no se permite hacer fotos sin un permiso escrito. Así que nos tuvimos que conformar con fotografiar la fachada. Una de las preguntas que se le hicieron a la guía en el tour fue que si el azul índigo de la fachada representaba alguna cosa en la cultura china. La respuesta fue que no, el propietario, el Sr. Cheong Fatt Tze, un visionario mercader que empezó a buscar fortuna en el 1856, tenía entre otros muchos negocios el del tinte azul índigo…La razón será simple, pero hay que admitir que el color le queda bien.
Pese a las malas condiciones de luz, al ser un día nublado, los colores que conseguimos con la LUMIX DMC-GF2 fueron completamente satisfactorios. Fijamos una velocidad de 1/200 para conseguir una foto nítida y ajustamos la apertura de diafragma correspondiente para que la exposición fuera la correcta. La escena era perfecta, el carro, el color de la pared, la puerta…sólo quedaba encontrar el mejor encuadre y el resto lo hizo la cámara.
Anécdota: Algunas de las escenas de interiores de la película “Indochina” fue rodada en esta mansión. Decidieron que el blanco original de las paredes no era un buen color para sus escenas, así que decidieron pintar las paredes de las salas donde rodaron de naranja. Aún hoy cuando vas a visitar la mansión, han pasado más de 20 años desde el rodaje y varias capas de pintura blanca, puedes detectar que los restos de la pintura naranja que utilizaron.
