Este verano hemos disfrutado de esta ciudad en su máximo esplendor, así que hoy os traigo un pedacito de ella y nos vamos a pasear por un sitio que no tiene nada de «rincón secreto», sino que se ha convertido en los últimos años en todo un clásico en la ciudad: El South Bank.
Se trata de un paseo junto a la rivera del Támesis que es una delicia. Un paseo que a mí, particularmente, cuando llego a Londres me hace sentir que estoy en ella. Es como una cita, una toma de contacto con la ciudad, un saludo mutuo… después de pasear junto al Támesis ya podemos ir a visitar nuevos rincones. Así que allá vamos a dar un paseo junto al río lleno de atracciones y puntos interesantes en los que detenerse.
En esta ocasión, como era sábado, empezamos nuestro paseo en el Borough Market, un mercado de comida con mucho encanto y mucho ambiente, en el que siempre es un placer para todos los sentidos pasear entre sus puestos de carnes, frutas y verduras, pasteles, panes y paradas de comida take away, así como los restaurantes y locales que hay en las calles próximas al mercado.
Fotografía realizada con Lumix GX7
Nosotros, que somos unos devoradores de pan, había algunos puestos en los que nos hicieron chiribitas los ojos. El mercado está abierto de jueves a sábado y os recomiendo ir los días de entre semana o a primera hora, cuando todavía puedes caminar tranquilamente por sus paradas y disfrutar del despertar del mercado tranquilamente.
Fotografía realizada con Lumix GX7
Después de esta explosión de gustos, colores y olores podéis seguir el paseo junto al Támesis hasta llegar al que será el siguiente destino, la Tate Modern, museo que alberga una gran colección de Arte Moderno ubicado en un edificio que antiguamente fue la central eléctrica del Bankside. Solo el edificio en sí y su impresionante sala de turbinas ya merecen una visita. La visita a las colecciones permanentes es gratuita. En su página web (www.tate.org.uk) podéis consultar las exposiciones temporales, y siempre muy interesantes, que podéis encontrar. Y os recomiendo acabar la visita en la cafetería del último piso con unas vistas del Támesis y la Catedral de Sant Paul que son un auténtico lujo.
Fotografía realizada con Lumix GX7
Desde allí podéis cruzar hasta la Catedral de Sant Paul por el puente peatonal del Millennium Bridge (diseñado por Norman Foster y construido para dar la bienvenida al año 2000), pero también podéis seguir caminando por el South Bank en la animada orilla del Támesis hacía el London Eye y el Big Ben. En esa zona están ubicados varios centros culturales, un mercado de libros de segunda mano y siempre hay actuaciones, mimos, o algún espectáculo callejero que os entretendrá mientras saboreáis las preciosas vistas que seguramente ya con la luz del atardecer os harán disfrutar de lo lindo con vuestra cámara de fotos. ¡Así lo hice yo con la Lumix GX7!
También puedes visitar mi blog Tea On The Moon 🙂